Pasar al contenido principal

Eficiencia y competitividad: las nuevas tecnologías revolucionan los servicios de agua y saneamiento

La aceleración digital en el sector del agua urbana es un factor crítico para resolver el principal reto al que se enfrentan los gobiernos: la seguridad hídrica. Esto se traduce en la disponibilidad y acceso al agua en cantidad y calidad que garantice el suministro a la ciudadanía y la realización de las actividades productivas.

Empleado de una compañía de aguas

El agua es un recurso imprescindible para la vida. Por lo tanto, disponer de un buen sistema de abastecimiento y saneamiento ayuda a mejorar las condiciones de vida y el desarrollo de las sociedades. En América Latina y el Caribe se cuenta con casi un tercio de los recursos hídricos del mundo, lo que es esencial para el crecimiento y funcionamiento de otros sectores como la agricultura, la industria o la energía.

IDB Invest y NTT Data han llevado a cabo una serie de investigaciones para proporcionar hallazgos, perspectivas y recomendaciones sobre cómo las nuevas tecnologías están transformando diferentes industrias y cómo el acceso a nuevas herramientas es crucial para cerrar la brecha digital en la región.

Como parte de esa serie, el estudio "Cómo las nuevas tecnologías están transformando el abastecimiento de agua y saneamiento en Latinoamérica y el Caribe" muestra que los avances como la Inteligencia Artificial o la Automatización, se retroalimentan y amplifican en sinergia con otros, como Big Data o Internet de las Cosas, creando un efecto multiplicador en la generación de valor.

En este sentido, el apoyo del sector público y el sector privado a través de colaboraciones se vuelve indispensable. En los últimos años se ha podido ver un incremento de estas Asociaciones Público-Privadas (APP), que tiene grandes beneficios para el agua y el saneamiento, ya que se cubren potenciales brechas atribuibles a limitaciones presupuestarias:

  1. mejora de la gestión y eficiencia,
  2. mejora de la cobertura y calidad de los servicios y
  3. aumento de la capilaridad, llegando a más zonas.

Por otro lado, el sector privado utiliza las nuevas tecnologías para poder aportar una mayor eficiencia en la gestión, mediante el uso de dispositivos IoT (internet de las cosas) en la captura de datos, la utilización de drones para dar seguimiento a niveles de agua o reconocimiento de la vegetación, así como modelos de Inteligencia Artificial y Big Data, que permitan hacer análisis para mejorar la toma de decisiones de los gestores e identificar y prevenir riesgos.

Además, dispone de las capacidades y el know how en el uso de nuevas herramientas y técnicas, y está actualizado en las tendencias y soluciones innovadoras del sector (por ejemplo, el empleo de metodologías BIM para el desarrollo de proyectos de activos hídricos).

Otro ejemplo clave es el uso de tecnologías de la información geográfica (GIS), como base para la gestión de redes, puntos de captación o de vertido de aguas, así como la gestión de activos y órdenes de trabajo

Desde BID Invest se está apoyando este tipo de iniciativas, por ejemplo, con el otorgamiento de una línea de crédito de $50 millones de dólares a Consorcio Anillo Hidráulico, una empresa conjunta entre filiales de Ortiz Construcciones y Proyectos, S.A. ("Grupo Ortiz"), para financiar la ejecución de obras civiles destinadas a mejorar el sistema de agua potable de la Ciudad de Panamá incluyendo la expansión y rehabilitación del acueducto del Norte de Panamá bajo un contrato de construcción con el Consejo Nacional para el Desarrollo Sostenible.

Otro ejemplo se encuentra en el paquete de préstamos a largo plazo de parte de BID Invest por aproximadamente US$300 millones a las concesionarias Águas do Rio  para fortalecer los servicios de agua y saneamiento en el Estado de Río de Janeiro, Brasil. El proyecto contribuirá a proporcionar un mayor suministro de agua potable con reducción de pérdidas, y servicios de recolección y tratamiento de aguas residuales.

 

Gráfico que muestra los impactos de la tecnología en el sector de agua y saneamiento

 

La aplicación de las tecnologías para hacer más eficiente la cadena de valor es otro de los aceleradores digitales. Desde la captación del agua hasta su devolución al medio natural una vez utilizada y tratada, las soluciones digitales están ayudando a gestionar el uso del agua de manera más efectiva.

Otro ejemplo son las soluciones que automatizan las plantas potabilizadoras, desalinizadoras y depuradoras, mediante el uso de modelos de analítica avanzada para mejorar la calidad del agua y reducir el consumo energético.

Las nuevas tecnologías también benefician, en última instancia, a los usuarios finales. La ciudadanía cuenta con más datos sobre el uso que hacen del agua y su calidad. Con recursos como los medidores de agua inteligentes que permiten la lectura remota de los contadores. Otras tecnologías, como los contadores por pulsos, permiten a los hogares tener una mayor conciencia del consumo de agua, lo que incentiva un uso sostenible y resulta en ahorros significativos en la factura.

Todos estos avances, sumados al aumento de la demanda mundial de agua derivado del crecimiento poblacional y el desarrollo empresarial, está despertando el interés de los fondos de inversión. Ante este panorama, la inversión en temas de agua y saneamiento ha sido uno de los enfoques incorporados por las gestoras de activos en su catálogo de productos, recibiendo grandes cantidades de capital.

Este mayor apetito inversor viene sustentado por dos ideas: resolver los desafíos relacionados con la escasez del recurso, y la preocupación social por el medio ambiente (que fomenta las inversiones en empresas que persiguen objetivos sostenibles).

Y las oportunidades no son pocas, pues existe un amplio abanico de compañías dedicadas al agua, desde las que tienen un enfoque tecnológico para encontrar soluciones que resuelvan la escasez, a otras centradas en el suministro y distribución.

El trabajo conjunto entre sector público y privado, combinado con la inversión en infraestructuras modernas y eficientes que integren tecnologías innovadoras, puede marcar la diferencia, garantizando un futuro donde todas las personas tengan acceso equitativo al agua potable y servicios de saneamiento adecuados, fundamentales para el bienestar de las comunidades y el desarrollo económico de los países.

Escrito por

Guillermo Mulville

Guillermo lidera el equipo de Telecomunicaciones, Medios y Tecnología (TMT) de BID Invest, adonde ingresó en 2016. Es responsable del desarrollo de

Felipe Ezquerra

Felipe Ezquerra es jefe de transporte de la División de Infraestructura y Energía de BID Invest. Tiene un amplio conocimiento y experiencia interna

Álvaro Romero Danés

Álvaro Romero Danés es ingeniero de caminos, canales y puertos. Director de la línea de negocio de agua en NTT Data con más de 13 años de experiencia

Transport

Posts Relacionados

  • Electric bus in Bogota
    Próxima parada para los buses eléctricos: ¿qué hacemos con las baterías?

    Esta modalidad de vehículos se consolida como opción clave frente al diésel para reducir las emisiones en el transporte público. El desafío, sin embargo, es encontrar formas efectivas de prolongar la vida útil de las baterías y de reciclar sus componentes.

  • Bicicletas en una estación de anclaje.
    Bicicletas compartidas: ¿El futuro de las ciudades de América Latina?

    Las soluciones de micromovilidad, como bicicletas y scooters compartidos, han cobrado gran importancia en las ciudades de todo el mundo; y en América Latina, su uso está creciendo cada vez más. Estas alternativas a los automóviles prometen reducir las emisiones, la congestión y la demanda de espacio de estacionamiento en los centros urbanos.

  • Image
    Desafíos y oportunidades para los autobuses eléctricos en América Latina y el Caribe

    Los responsables políticos son conscientes de la importancia de reducir emisiones y los fabricantes están poniendo en marcha nuevos autobuses eléctricos; y los inversores del sector privado se inclinan por las inversiones en este sector, como demuestran las recientes licitaciones en Bogotá y Santiago. Sin embargo, todavía hay obstáculos al despliegue masivo de autobuses eléctricos.